El peeling químico es un tratamiento seguro que por medio de una exfoliación química ayuda a quitar manchas de la piel, particularmente, brazos, codos, rodillas y piernas; además de mejorar la apariencia en zonas con estrías o cicatrices.
El procedimiento consta de aplicar diversos ácidos en concentraciones específicas para cada zona a tratar, se acompaña de cremas especiales de apoyo en casa.
Se requiere valoración para determinar el número de sesiones, generalmente se recomiendan de 4 a 6 sesiones cada 15 días.